Para volver de vacaciones nada mejor que empezar recordando un viejo clásico:
En 1993 los californianos Counting Crows se dieron a conocer con “August and everyting after”, un muy buen disco que tuvo una buena acogida por parte de público y crítica. Han pasado 15 años y para mi sigue siendo uno de esos pocos discos que se pueden disfrutar de principio a fin. Pero como suele pasar muchas veces, cuando se empieza muy fuerte cuesta mucho mantener el listón. En los siguientes tres discos (de estudio) el grupo continuó dando pinceladas de calidad pero reduciendo considerablemente el nivel de cada etapa.
Este año han sacado “Saturday nights and Sunday mornings”, un disco que se me vuelve a quedar corto, y donde escasean todavía más las buenas canciones.
Tal vez sea mala idea engancharse tanto a un grupo con un primer disco.