El pasado sábado día 20 de Marzo, tanto Michel como un servidor tuvimos la oportunidad de presenciar, junto a nuestras esposas y un tropel más de personajes anónimos, la puesta en escena del músico islandés Ólafur Arnalds en el moderno Centro Párraga de Murcia. En primer lugar gracias a El Sombrerero Loco, nuestro querido asociado, por descubrirme semanas antes a este genial músico. Desconocía su existencia por completo y de unos días hacia acá se ha convertido en mi banda sonora personal de pre-Semana Santa.

Ólafur se presentó ante el público de Murcia con su piano y un cuarteto de cuerda formado por Olga Bjork, Sigurdur Bjarkki Gunnaarsson, Greta Salome y Margret Soffia Einersdottir. Pero no todo en el concierto fue grande y maravilloso; para ser más exactos fue un cúmulo de anécdotas y accidentes. En primer lugar el concierto se inició diez minutos antes de lo programado cosa poco usual, pero gracias que estábamos sentados en nuestro asiento con la suficiente antelación. El concierto se inicio con un repertorio que se centraba en sus álbums "Eulogy for Evolution" y "Found songs"… y en el cuarto tema (creo recordar que era "Untitled #8", tema que cierra "Eulogy…") llegó el fiasco. En algunos temas Ólafur utilizaba un portátil Macintosh para bases pregrabadas, sonidos y alguna sección rítmica (batería, bajo…) y según el propio músico, la tarjeta de sonido falló durante dicho tema y paralizó el concierto 5-10 minutos. Transcurrido ese tiempo se reinicia el concierto pero al siguiente tema vuelve a ocurrir lo inevitable. La tarjeta de sonido muere y tras un breve parón Ólafur comunica al público que el concierto continuará sin esas bases pregrabadas, completamente acústico, algo que muchos de nosotros agradecimos enormemente. El concierto volvió a la normalidad, algo más orgánico y sin máquinas por en medio, con temas como "Erla's waltz"; incluso, poco antes del final, parte de la sección de cuerda desapareció para no volver a salir, quedando únicamente en el escenario piano y cello. Y sorprendentemente a la hora y cinco minutos de haberse iniciado el concierto, los músicos se retiran y no vuelven a salir. Sin bises y con cincuenta escasos minutos de música. Quizás en las frías tierras de Ólafur eso sea lo normal, quien sabe…

En lo musical, los temas me sorprendieron gratamente. No había tenido prácticamente la oportunidad de escuchar detenidamente su obra, sólo un par de escuchas de "Eulogy…" y directamente al concierto. Así que fue casi descubrir su proyecto "a pelo". Mucha simplicidad, mucha repetición, mucho minimalismo. Música donde los silencios son tan importantes como las notas y donde la paciencia es el mejor aliado del oyente. Armonías accidentales y melodías delicadas. Complejo y sencillo a partes iguales. Hay quien dirá que el minimalismo es una estafa, un fraude. Que es la repetición incesante de las mismas estructuras y cadencias. A esos les recordaré lo gratificante que es algo tan repetitivo como "hacer el amor" (por llamarlo de una manera delicada). Lo que a simple vista puede parecer algo sencillo y repetitivo (¡…!) puede llegar a ser el sumun de lo extraordinario. Pues así siento este tipo de música. Repetición de frases sencillas pero bellas, decoradas con aderezos puntuales. Así de simple. Como un mantra.

Al finalizar este concierto, todo minimalista hasta las proyecciones de sus representativas aves que forman la portada de "Variations of Static" y en la duración del mismo, pudimos estar con Ólafur para que nos firmase unos autógrafos y hacer unas fotografías (para envidia de algunos). Por cierto que pudimos conseguir parte de su discografía a un precio más que razonable.

Sí queréis escuchar su último disco, aquí os dejo su enlace con Spotify, siete canciones que fueron grabadas en una semana - una al día - y que posteriormente fueron recopiladas en este "Found songs". También os cuelgo algunos temas grabados en directo para que os podáis hacer una idea del concierto y del ambiente que se podía respirar: "Cello song" y "Fok", este último tema al igual que en la entrada de El Sombrerero Loco, pero en directo. Venga, también os cuelgo la preciosa "Erla's waltz", ¿Se puede pedir algo más escueto y profundo? Con tan solo 24 años aquí tenemos a otro chavalote haciendo música para adultos.

Un saludo y feliz escucha.



Ólafur Arnalds – “Cello song”.



Ólafur Arnalds – “Fok”.



Ólafur Arnalds – “Erla’s waltz”.