Pero el caso que trae a Tears for Fears a nuestro blog es este pedazo de disco de 2004; el re-encuentro creativo de Orzabal y Smith y una continuación lógica de "The seeds of love" con un sonido muy cerca de unos Beatles del siglo XXI. Lo cierto es que veo más cerca de los de Liverpool a estos Tears for Fears que a los propios Oasis, por mucho que digan los Gallagher. Este disco es, por muchos momentos, un auténtico alegato de la producción musical en un estudio de grabación. Nada superfluo, todo barroco y sin simplicidades. Capas y capas de instrumentos y pistas que llenan cada segundo de un disco que sigue asombrándome con cada escucha. No entiendo como "Call me mellow" ha podido ser compuesta por esta pareja. Pedazo de rickenbakers que suenan en este tema… Toda esa obsesión hacía los Beatles más lisérgicos y ácidos se hace evidente en temas como "Everybody loves a happy ending", que abre el disco (ese "Wake up…"). En "Who killed tangerine?" incluso insertan un sampler de la famosa transición orquestal que hicieron The Beatles - bueno George Martin - en la maravillosa "A day in the life". Difícil decidir entre canciones destacables. Este disco es por sí sólo una delicia: "Secret world" es una descarada carta de amor a Burt Bacharach, la deliciosa "Who you are" es puro pop; un disco conceptual que hay que escuchar en toda su magnitud como una unidad indivisible. Hasta los temas vienen sin prácticamente cortes entre ellos; como una gran canción de cincuenta y cinco minutos.
Os dejo el enlace con Spotify para que escuchéis este pedazo de disco que con bastante retraso he descubierto. También os dejo unos cutre-vídeos de sus temas "Who killed tangerine?", "Everybody loves a happy ending" y "Secret world".
Un saludo y feliz escucha.
Tears for Fears – “Who killed tangerine?”
Tears for Fears – “Everybody loves a happy ending”
Tears for Fears – “Secret world”.